Estamos a unas horas de definir el rumbo que tomará nuestro México durante los próximos 6 años y uno de los actos de responsabilidad cívica que tenemos como mexicanos es salir a votar este próximo 2 de junio.
Somos un país que todavía se rige por la democracia, tenemos la oportunidad vigente de elegir a nuestros gobernantes y legisladores mediante el voto LIBRE Y SECRETO. Emitiendo este voto no solo estaremos gozando de nuestro derecho a votar, sino que también estaremos empoderándonos y a la vez fortaleciendo la democracia.
Como ciudadanos hemos sido defraudados por muchas personas que tienen o tuvieron cargos en el gobierno ya sean presidentes, gobernadores, alcaldes, diputados, senadores o incluso regidores y síndicos. Es por eso por lo que, decidimos muchos de nosotros optar por no salir a votar por nadie, generando el nacimiento de la abstención como medio de castigo a quienes nos piden el voto, sin embargo, los únicos castigados somos nosotros mismos, pues así les permitimos que vuelvan a defraudarnos cuantas veces quieran hacerlo.
Empoderarnos como mexicanos, como juarenses, está en nuestras manos, cada voto es una voz que encaminará el destino de nuestra sociedad, renunciemos a dejar nuestro destino en manos de quienes nos han traicionado.
Las decisiones electorales suelen ser el resultado de distintos factores, el más alarmante a mi parecer es el emocional. Hay quienes su estrategia es hacerte creer que te entienden para luego prometer utopías, mismas que al cabo de algunos años te darás cuenta de que solo llevaron al país al retroceso, por eso es recomendable que tu voto no sea hacia el que dio el discurso más emotivo o a quien utilizó frases o canciones pegajosas que si estudias a fondo te darás cuenta de que carecen de contenido real, es decir, solo se escucha bonito, pero están huecas.
Partidos políticos van, vienen o se alían, aquí la idea es que no salgas a votar solo por votar, se trata de tener un voto razonado e informado.
Otro de los factores que pueden influir en la votación en la actualidad son los medios de comunicación pues hemos evolucionado exponencialmente en las redes sociales sobre todo después de la dolorosa pandemia que tuvimos que enfrentar, sin embargo, un efecto negativo de quienes usan las redes sociales para su beneficio son los pseudo políticos, por ejemplo: aquel candidato que no se dio el tiempo de ir a conocer las necesidades que tiene la ciudad, pero si se dio a la tarea de hacer videos para darse a conocer y subirlos a redes sociales para luego descaradamente pedir tu voto.
El poder que tenemos como ciudadanos es abismal, sobre todo los mexicanos caracterizados por ser resilientes, entrones, trabajadores y luchones, este 2 de junio salgamos a demostrar que somos responsables y VOTEMOS.
Comprender que los corruptos no son los partidos políticos, ni lo son las instituciones, y entender que son las personas físicas quienes se aprovechan de sus cargos de poder para enriquecerse es crucial, ya que su avaricia los ha orillado a olvidar que el servicio público es para servir a las personas y no para servirse de ellas.
Particularmente estas elecciones están plagadas de políticos que saltan de un partido a otro con el único propósito de seguir en el poder, pareciera que su propósito en esta vida es ir engañando, robando y traicionando. Por suerte los juarenses podemos identificar perfectamente a esos bandidos que piensan que porque se cambiaron de partido ya han sido redimidos.
Algo importante de señalar es que, aunque los partidos políticos por sí solos no cometen actos de corrupción y traición, si tienen ideologías políticas y éste es otro de los factores que ayuda a las y los ciudadanos a tomar la decisión, para ello, informarnos sobre cuál ideología es la que sigue cada partido es vital saberlo, pues sus militantes actúan conforme a los estatutos del partido. Es por eso por lo que se les califica de desleales a quienes pasan de un partido político a otro y sobre todo si son contrarios a sus corrientes ideológicas.
El libre albedrío nos permite tomar nuestras propias decisiones y para ello viene implícito que en cada decisión que tomemos tendremos la responsabilidad de afrontar las consecuencias para bien o para mal. Si nos llegáramos a equivocar por suerte aún tenemos a la democracia, que para próximas elecciones podremos enmendar nuestro error no votado por los mismos que nos traicionaron (ni, aunque se cambien de partido, porque solo cambian de trinchera más no de corazón)
Vamos a votar este 2 de junio, México, Cd Juárez merece lo mejor.
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